CAPUTO AHORA DICE QUE NUNCA PIDIÓ USD 20 MIL MILLONES….

¿Y LOS ARCHIVOS, LAS NOTAS PERIODÍSTICAS DONDE LO CONTÓ, LAS FARABUTADAS DICHAS EN EE.UU?…. NADIE RESISTE LOS ARCHIVOS. Toto Caputo intentó contener el golpe que causó la noticia que el JP Morgan se bajaba del mega préstamo para la Argentina y dijo que nunca pidieron USD 20.000 millones, el puente financiero más ambicioso de la era Milei. Pero el mercado no le creyó y respondió con ventas masivas de acciones y bonos, que dispararon el riesgo país.
«Nunca hablamos con los bancos de un rescate, ni de 20 mil millones. Es una «operación» más con la sola intención de generar confusión», posteó Caputo en X, con un su habitual jactancia, más propia de momentos de éxito. Excepto, que es mentira, en una entrevista con Esteban Trebucq, confirmó que esperaban un crédito de USD 20 mil millones (ver video).
El mercado reaccionó mal, porque ese préstamo estaba destinado a cubrir los vencimientos del año próximo, que rondan ese monto. Como el Banco central tiene USD 11 mil millones de reservas negativas, ahora no se sabe como hará Caputo para pagar la deuda, ya que el mismo confesó que no tenía los dólares.
En la City venían siguiendo el tema hace semanas: el préstamo que debía anclar expectativas, bajar la prima de riesgo y despejar -al menos parcialmente- la curva de vencimientos. Por eso este viernes el mercado olfateó sangre.
Los números: el Merval perforó mínimos de casi un mes. Los ADR argentinos se tiñeron de rojo. Los bonos retrocedieron en bloque. Y el riesgo país saltó a la zona de los 650 puntos, consolidando un clima de creciente desconfianza. Los informes privados que circularon en la jornada suman presión. No se concretan las compras oficiales de bonos. No hubo anuncios de anclaje fiscal nuevos ante una presión creciente sobre las cuentas públicas.
El Gobierno intentó mostrar como una continuidad del acompañamiento externo, la participación del JP Morgan en la «Argentina Week» que se realizará en Nueva York en marzo. El banco prefirió gastarse unos pocos dólares en acompañamiento de relaciones públicas, que arriesgar USD 20 mil millones con un cliente de mala reputación.









