En medio de la crisis nacional y los recortes presupuestarios, la provincia continúa brindando apoyo a aquellos más necesitados a través del Plan Calor Garrafas, dando muestras claras de su compromiso con el bienestar de las familias rionegrinas.

Este programa, que ha sido un eje de gestión desde 2012, se ha convertido en una herramienta esencial para miles de familias que se enfrentan a las bajas temperaturas, especialmente en áreas que no tienen acceso al gas natural. En esta ocasión, el Gobierno adaptará el programa a las circunstancias, manteniendo la asistencia provincial cada 15 días.

A pesar de las dificultades económicas, se destinará una inversión de casi 1.370 millones de pesos con fondos íntegramente provinciales. Gracias a esto, se espera poder llegar a 8.000 familias en la Zona Andina, la Región Sur y parte de la Zona Atlántica. Este esfuerzo demuestra el compromiso del Gobierno de Río Negro de hacer todo lo posible por garantizar la asistencia a aquellos que más lo necesitan.

Uno de los cambios implementados para este año es la introducción de un sistema digital para acceder al beneficio. Utilizando códigos QR personales, se buscará agilizar el proceso de entrega de las garrafas y garantizar mayor eficiencia en el programa. Esta innovación es un paso adelante en la modernización de los servicios sociales de la provincia, mejorando la experiencia de los beneficiarios con un procedimiento más práctico.

El operativo de entrega comenzará el 3 de junio y se llevará a cabo de manera planificada y organizada, en colaboración con las autoridades locales y las comunidades. Esto asegurará que la distribución de las garrafas gratuitas sea equitativa y transparente.

El compromiso del Gobierno de Río Negro con el bienestar de sus vecinos es evidente en su perseverancia para mantener programas como el Plan Calor Garrafas.