HIPÓCRITAS RESERVAS NATURALES: EN REALIDAD ZONAS DE SACRIFICIO AMBIENTAL
¿Cómo alguien puede sentir la autoridad moral de autorizar hipócritamente lo que va a contramano de la legislación y afectando nuestro principal recurso ambiental? ¿Hay sobres en las gestiones realizadas ante los estamentos municipales que intervinieron y soslayaron la opinión ciudadana?
Los vecinos de Bariloche, emitieron un comunicado que expresa textualmente que: «aun conmocionados por la resolución del intendente Gennuso que dio vía libre al mega proyecto hotelero a desarrollarse en el predio que perteneció al jerarca nazi Ingo Priebke en la costa del lago Moreno, ahora resuelve también a favor de otro mega proyecto en el predio Las Promesas, en el km 19 de Bustillo, perteneciente a la Reserva Natural Urbana El Trébol.
Los vecinos de la Reserva alegan que en ninguno de los dos casos tuvieron la posibilidad de participar y opinar como lo regulan las ordenanzas, porque desde el año 2012 no fueron jamás informados del proceso de este expediente.
Tampoco para la aprobación de ninguno de los dos emprendimientos, se llamó a la participación de la comunidad en general, pues las externalidades de los mismos, a saber la repercusión en la calidad de vida de los habitantes de Bariloche a partir de su realización, importaría mayor deficiencia en la ya insuficiente infraestructura de servicios, mayor congestión del tránsito, y un brutal impacto en el recurso de todos que es el Patrimonio Ambiental de la ciudad.
Tampoco se consultó a las unidades de gestión local, a saber, el Departamento Provincial de Aguas, los bomberos, el SPLIF, las Universidades, las Juntas Vecinales, Defensa Civil, Policía, a la Unidad Coordinadora del Concejo Deliberante etc.
Desde el código urbano del 80 y en todas las ordenanzas posteriores, este tipo de emprendimientos requieren sí o sí la participación ciudadana.
En ambos casos se violan las normativas al enmarcar ambos proyectos en ordenanzas que no corresponden.
El proyecto Constelación Sur, se afirma en el código urbano del 80 y del 95, cuando las ordenanzas que rigen la Reservas Naturales Urbanas estaban vigentes dos años antes de que se aprobara el inicio de obra.
En el caso de CAUMA, en el Plan de Desarrollo Ambiental del Oeste, que no derogó los Planes de Manejo de la RNU, cuyo objetivo fundamental es la protección del paisaje, y la conservación del patrimonio ambiental.
En ambos predios hay humedales que se verían intervenidos gravemente, pero en el caso de Constelación Sur, gran parte de las hectáreas donde se desarrollaría el loteo es un humedal que genera un arroyo que deriva sus aguas a Bahía Campanario, de la cual toman agua la mayoría de las Juntas Vecinales del Oeste.
Los residuos cloacales y otras sustancias toxicas escurrirían indefectiblemente hacia el Nahuel, dejando de ser aprovechable el agua aún como costa de uso recreativo.
No se sabe tampoco cómo el hotel 5 estrellas va a contener en el espacio que separa la ruta de la costa, el volumen de aguas servidas que devendría con su funcionamiento.
Parte de este proyecto se haría en Zona de Protección de la RNU, donde está prohibido la instalación de infraestructuras. Se trata de un morro al sur del predio que daría vista al Nahuel a los lotes más privilegiados, ocupado en su totalidad por bosque nativo.
Más allá de la degradación del humedal que atraviesa CAUMA, se haría la voladura de un morro con el bosque que lo engalana para poner el hotel, infringiendo cantidad de normativas del Servicio Forestal Andino y de la Reserva, y la Ordenanza 2020-CM-2010 con su mapa de Bosques Protectores y Nativos.
Ya el bosque ha sido apeado en más de 150 ejemplares y, realizado sin autorización un camino interno que destrozó raíces y renovales en cantidad.
Luego de las denuncias insistentes de los vecinos, aun no se desarmaron las instalaciones de la náutica que sin ninguna autorización desarrolló sus actividades.
También para acceder al predio de CAUMA, por el actual camino de las Carmelitas Descalzas, apenas una servidumbre de paso vecinal que por momentos tiene 4 y 6 metros de ancho, para el aumento exponencial del tránsito, se necesitaría hacer la voladura de la piedra del Cerrito Ezquerra y contener con gaviones la ladera que desciende hacia el barrio Don Bosco. No hay que olvidar Villa Huinid.
Gracias a la presencia, lucha e insistencia de los vecinos frente al Municipio y al Servicio Forestal Andino, todavía las Reservas del Oeste siguen distinguiéndose por la calidad de sus bosques y de sus aguas, que son los valores que específicamente atraen la cantidad de turistas que dan de comer a Bariloche.
Dice María Ruffo, referente de la Junta Vecinal El Trébol: -Lugares en Bariloche que conserven su antiguo e incomparable paisaje quedan pocos, merced a los negociados y la avidez inmobiliaria. Paradójicamente, los grandes inversores quieren justamente instalar sus negocios en zonas como nuestras Reservas, para luego dejarlas convertidas en lugares degradados como los que ya destrozaron.
Basta ver los kms. 6 y 7 de Bustillo y la costa del km.1 como ejemplo de destrucción de los bosques y las costas por parte de los grandes emprendimientos, con el consentimiento de nuestros funcionarios.
Vecinos Pro Reserva Natural Urbana Morenito Ezquerra
Vecinos Pro Reservas Naturales Urbanas El Trébol
Asociación Civil Árbol de Pie
Observatorio por el Derecho de la Ciudad de Bariloche
Luciano Celsi, representante del CPE de las Juntas Vecinales del Oeste