Una integrante de la centenaria población Cuevas denunció ante la justicia penal que la amenazaron de muerte, luego de haber evidenciado la contaminación ambiental que existe en el basurero municipal de Villa Traful.

Recientemente, desconocidos colgaron un muñeco en la entrada del predio, simulando un cuerpo ahorcado que pende de un árbol.

Trascendió que la vecina Elizabeth Martina Cuevas radicó una denuncia policial por sentirse amenazada, luego de toparse con la macabra escena en el portón del basurero municipal.

En este contexto, el abogado de la familia Cuevas, Cristian Hugo Pettorosso, aseguró que recorrió el predio junto a su clienta para levantar evidencias que pudieran resultar útiles para la causa penal en la que interviene y declaró: “los pájaros estaban comiendo restos orgánicos en lo que parecían ser partes de fetos tirados entre todo ese material de residuos sin tratamientos depositados a muy poca distancia de la orilla lacustre”.

Respecto de “la amenaza de muerte”, el letrado indicó: “resulta sospechosa la deliberada ubicación del elemento colgante que generó temor a la víctima, a metros del sector de ingreso a un predio nauseabundo que contamina el lago y daña la fauna”.

Agregó ademá que “es sumamente llamativo que los autores de esta cobarde amenaza hubieran elegido ese preciso lugar para realizar el simulacro de un cuerpo colgante, ya que su cliente hace rato vienen reclamando a las autoridades que hagan algo frente al desastre ecológico que está causando dicho basurero”.

El conflicto de fondo

Pettorosso explicó que “si bien existe un álgido conflicto con otra familia que intenta ubicarse en el sector histórico donde mis patrocinados habitan permanentemente como legítimos pobladores desde hace más de un siglo en un privilegiado sector del Parque Nacional, me mueve a fundadas sospechas que la intención de amedrentar venga por otro lado; toda vez que la señora Martina Cuevas hace tiempo viene cargando reproches contra autoridades públicas por la contaminación del medio ambiente que ocasiona el basurero municipal clandestino localizado a metros del lago, que se observa abandonado, infringiendo absolutamente todas las normas que hacen al cuidado de la ecología”.

Según el abogado de la denunciante Cuevas, “el basurero a cielo abierto desde hace años está contaminando el Parque Nacional Nahuel Huapi, pues está afectando las napas subterráneas con vertidos putrefactos y también está dañando la fauna que se alimenta de toda esa inmundicia descontrolada por las autoridades de aplicación que, obviamente, no pueden ignorar lo que sucede a menos de un kilómetro del pueblo”.

“La omisión de la debida actividad por parte del estado, facilita el daño a la salud pública de los vecinos de Traful, dado que se advierte una alarmante falta de reciclaje, en donde los camiones y hasta vehículos particulares tiran y se mezclan residuos potencialmente causantes de enfermedades infectocontagiosas” (DiarioAndino)