En la mañana del jueves 18 de febrero, el gobernador McMaster aseguró en una conferencia de prensa que iba a firmar la legislación y declaró que este “es un gran paso adelante en el movimiento provida aquí en Carolina del Sur”.
La nueva ley prohíbe los abortos después de que los médicos detecten los latidos del corazón de un bebé nonato, generalmente alrededor de las seis semanas de embarazo. Se permitirían excepciones en casos de violación, incesto o riesgo para la vida de la madre.
Las personas que violen la ley podrían enfrentar una multa de diez mil dólares o una pena de prisión de hasta dos años. El congresista republicano David Hiott dijo que “este es el mayor proyecto de ley provida que este estado haya aprobado”, según recoge ABC News.
Varios estados han aprobado también leyes sobre los latidos del corazón de los no nacidos en los últimos años, pero a la mayoría se les ha prohibido aplicarlas debido a demandas judiciales por parte de grupos proaborto.
Entre los estados que ya han aprobado una ley provida similar se encuentra Georgia, Iowa, Kentucky, Mississippi, Missouri, Dakota del Norte, Ohio y Tennessee. (Aciprensa)