El joven, oriundo de la provincia de Buenos Aires quiso descender del cerro en línea recta, sin utilizar la picada, y quedó en una zona muy complicada. Los gritos de auxilio alertaron a los visitantes que pasaban por la zona. Dos de ellos intentaron llegar para rescatarlo y se perdieron en el bosque.

Todos lograron ser rescatados por guardaparques municipales y rescatistas del ICE, con la colaboración del refugiero del López.

Ocurrió este viernes, cerca de las cinco y media de la tarde, cuando guardaparques municipales que recorren preventivamente la zona de Llao Llao fueron alertados desde Protección Civil, de un turista extraviado entre los refugios López y Roca Negra.

El cuerpo de guardaparques del municipio, ante esa situación, emprendieron el recorrido que lleva a esa zona, escuchando pedidos de auxilio en el cañadón ubicado en cercanías.

Los gritos estaban cada vez más cerca, pero los guardaparques no lograban divisar al extraviado, hasta que, en un momento, cerca de un arroyo y en un acantilado muy peligroso, vieron al hombre que permanecía sin poder moverse, ante el riesgo de caer por el precipicio.

Ante la llegada de la noche y debido a la necesidad de otros elementos para auxiliar al hombre situado en el acantilado, los guardaparques decidieron solicitar el apoyo a brigadistas del área de Incendios, Comunicaciones y Emergencias del Parque Nacional Nahuel Huapi (ICE), intentando calmar al visitante hasta que se efectivice el rescate.

El hombre exaltado por los nervios continuaba pidiendo auxilio y gritando, motivo por el que otros visitantes que pasaban cerca del lugar, por la picada, intentaron llegar para rescatarlo y dos de ellos, también provenientes de la ciudad de Buenos Aires, se extraviaron dentro del bosque.

Finamente el extraviado rescatado fue llevado hasta el refugio, adonde pasó la noche para emprender el descenso el sábado por la mañana. Los otros dos extraviados fueron hallados por los guardaparques municipales de Llao Llao, también en buenas condiciones y sin heridas recibidas.-