En la mañana de hoy, tres hombres empleados de una empresa de asistencia en tierra que habrían engañado a un matrimonio que se disponía a embarcar en una aeronave privada en el aeropuerto, fueron imputados por el delito de tentativa de estafa. El hecho ocurrió en abril de este año, alrededor de las 10:00 de la mañana, en la posición auxiliar número 12 del Aeropuerto Internacional Teniente Luis Candelaria de Bariloche.

Los acusados habrían solicitado un pago de en principio 120 dólares, luego 120.000 con recibo o 90.000 sin recibo, -sin detallar en ese momento si eran dólares o pesos-; por el estacionamiento de la aeronave. Todo ello a pesar de que sabían que debido a su peso, el avión estaba exento de dicho cargo.

Presionados con el tiempo y con el objeto de respetar el plan de vuelo original, las víctimas habrían entregado 100.000 pesos a los empleados, tomando previamente una fotografía como prueba del pago. Tras dar aviso a la torre de control para informar la situación. A raíz de la fotografía fue devuelta la suma de dinero.

«Esta conducta no está prevista en los protocolos internos de la empresa en cuanto a la facturación y cobro de servicios», explicó el fiscal.

Para poder formular estos cargos, detalló el fiscal los elementos reunidos en esta investigación que ha llevado su tiempo, que hemos dado con bastante información. En primer término surgió del acta de denuncia, la respuesta al oficio por parte del encargado de la empresa con la nómina de aquellos empleados que se encontraban en ese lugar. Se cuenta además con la intervención de la PSA que pudo dar con la identidad de cada uno de los cuales habían participado en el hecho, la imagen fotográfica de uno de los imputados con el dinero.

Se agregan los testimonios de las/los controladores de tránsito aéreos, notas de las empresas que operan en jurisdicción del aeropuerto que dan cuenta de norma de procedimientos para la facturación y cobranza del servicio de cobranzas junto a facturas anexas. Poniendo de manifiesto que esto no era una situación ordinaria ni habilitada, aquello que habrían intentado los imputados.

Todos ellos fueron asistidos por un defensor particular quien no manifestó objeciones en esta etapa procesal. Adelantó que trabajará en otra teoría del caso; «entiendo que en estos cuatro meses vamos a poder dotar al Ministerio Público Fiscal de la información necesaria para que se corrobore la teoría que maneja la defensa».

El Juez de Garantías tuvo por formulados los cargos por el delito de estafa en grado de tentativa de acuerdo a lo normado en los artículos 172, 42 y 45, teniéndolos a los tres que eran partícipes de este hecho como coautores. Se les impuso como pauta de conducta fijar domicilio.