GUARDIA DE CENIZA: EL TRABAJO CLAVE PARA EVITAR RE-INICIOS DEL FUEGO EN EL BOLSÓN
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Mientras los brigadistas, en coordinación con organismos nacionales y provinciales, aún luchan contra las llamas en algunos sectores del incendio en El Bolsón, en otros se desarrolla una tarea fundamental para evitar nuevos focos: la guardia de ceniza. Se trata de una fase esencial en las labores de contención.
Según explicó Alejandro Namor, jefe de Cuerpo de la Asociación de Bomberos Voluntarios de El Bolsón, la guardia de ceniza consiste en un monitoreo constante del terreno que, aparentemente, está apagado, pero aún presenta riesgo de reactivación. El área afectada por el incendio se divide en seis sectores, de los cuales cuatro se encuentran en fase de enfriamiento y guardia de ceniza. En estos sectores, los equipos de bomberos voluntarios continúan con patrullajes y monitoreos constantes.
“Cuando recorremos la zona, todo parece apagado, solo se ven cenizas. Pero de repente el humo vuelve a aparecer. Esto ocurre porque, bajo esa capa de ceniza, la maleza sigue prendida. Son entre 60 y 80 centímetros de residuos forestales acumulados que retienen el calor. Hay que estar muy atentos y controlar todo”, explicó Namor.
Este material en combustión subterránea puede generar focos de calor que, con la acción del viento y la sequedad del ambiente, reaviven las llamas y propaguen nuevamente el fuego. “Todo ese material es combustible puro, y si no se controla y se apaga a tiempo, puede ocasionar reactivaciones”, advirtió.