Es claro y evidente que el jefe de estado no puede dejar de concurrir a un hecho tan importante y mundial pero qué falsedad manifiesta. Expresar dolor por quien fue su acérrimo enemigo, a quien trató de «imbécil y representante del demonio en la tierra» es de una falsedad absoluta. De quien fomentando la división también fue artífice de su no venida al país para no exacerbar esa división que nos enferma.-

Un presidente que abandonó la religión para hacerse judío y encima judío fascista y reaccionario, que no comparte ni empatiza con cada uno de los predicamentos del evangelio y la Biblia como Francisco y acompañado de gente que piensa similarmente a él, da vergüenza y repudio.

Pero deberán acepar su presencia en la ocasión, incluso sabiendo que sólo lo hace para tener otra foto con Trump y ver si tiene ocasión de chuparle las medias y manguearle servilmente algo que le de negocio no al país sino personalmente. En fin…. viaja este jueves y lo veremos por televisión falsamente compungido…. (ROSL)