ALGUNOS CON SU AUSENCIA A LA MISA POR LA PAZ RATIFICARON QUE NO LES SIRVE
Todos los sectores de la alianza de gobierno se dieron cita en la Basílica de Luján. “Ya es un hecho de paz y fraternidad que estemos aquí. Este lugar es como un concentrado de la patria. Aquí vienen millones de peregrinos de todos los partidos políticos”.
Las palabras del arzobispo Jorge Eduardo Scheinig, fueron el preludio de un sermón en el que llamó al diálogo, la paz, la convergencia y el perdón. También se le agradeció a la virgen por cuidar a la Vicepresidenta en el intento de asesinato y se le pidió por la salud del senador nacional del PRO, Esteban Bullirch.
En las primera filas invitados especiales, de la mitad hacia el fondo feligreses y público en general. En las pasarelas superiores paseaba parte de la seguridad. Por el resto del operativo no varió mucho a otros actos.
“Hay una necesidad de unir a los argentinos y el diálogo se va a imponer”, marcó el ex presidente Eduardo Duhalde desde Luján. El ex mandatario se ubicó a la izquierda de Alberto Fernández durante la ceremonia y “Debemos parar la pelota y pensar hacia adelante”, deslizó la presidenta de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau.
En la camioneta de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini siguió la ceremonia a través del celular, sentada en la primera butaca dentro de la combi. La presencia fue un acompañamiento a la convocatoria pero también fue una decisión política su no ingreso a la Basílica, como se sabe es absolutamente atea.-
¿Ausencias notables? Cristina Fernandez, Maximo Kirchner, Mauricio Macri, Rodriguez Larreta, Mario Negri, Patricia Bullrich, en fin…