BURDO INTENTO DE DISTRAER CON REPRESIÓN A JUBILADOS, LA ATENCIÓN DE LA ESTAFA DE LAS CRIPTO-MONEDAS

Innecesariamente, incluso cuando los manifestantes estaban sobe la vereda, los efectivos policiales recibieron la orden de activar el protocolo anti-piquetes de Patricia Bullrich, gaseando y generando un desastre entre los más ancianos. La deseperación y desorientación de los funcionarios del gobierno ante la estafa es más que evidente.-
Un increíble nuevo ataque de la Policía Federal a los jubilados que se congregan todos los miércoles frente al Congreso de la Nación, donde dos mujeres quedaron tendidas en el piso tras los empujones de los efectivos habilitados por Patricia Bullrich y el efecto del gas pimienta, se vio en todo el país por los canales de tv nacionales.
La feroz represión a un numeroso grupo de jubilados no tuvo razón de ser: los ancianos se encontraban manifestándose de manera pacífica, pero de igual modo los agentes emplearon todos sus violentos recursos para que la protesta finalice.
Las personas de mayor edad y jubilados se congregan cada miércoles para reclamar contra las políticas de ajuste del gobierno de Javier Milei que, entre otras medidas, redujo el acceso a medicamentos que entrega PAMI, desabasteció a los enfermos de cáncer y licuó el bono que venían recibiendo.-
Los periodistas deberíamos analizar seriamente el apoyo que se brinda a los reclamos de los propios policías, gendarmes y prefectos cuando lo necesitan y se expresan, ante estas actitudes que tienen contra los jubilados de agredirlos y gasearlos para provocar, desarmar las protestas y desatar sus psicosis personales. Pueden cumplir su cometido sin necesidad de pegar, empujar, gasear, apalear y provocar.-
EN BARILOCHE TAMBIEN SE REALIZÓ «EL ABUELAZO» CONTRA LAS MEDIDAS NACIONALES
Fue en horas del mediodía en el Centro Cívico, como todos los miércoles desde hace varias semanas. Junto a banderas y carteles expresaron su rechazo a las medidas nacionales. Bajo las consignas como «Amenazar no es gobernar» y «La lucha no se jubila», el reclamo se centró en el desfinanciamiento del instituto, la pérdida de prestaciones y los despidos.
Los manifestantes exigieron tambien la restitución de la entrega gratuita de medicamentos para los afiliados. «No solo se trata de las pensiones, sino de nuestra dignidad y la de todos los que dependemos de una atención que hoy está en riesgo. Si no luchamos por lo que nos corresponde, que ya pagamos ¿quién lo va a hacer?», comentó una de las manifestantes.