DIECIOCHO MESES DE PRISIÓN EN SUSPENSO Y PAUTAS AL ACOSADOR DE LA JUEZA PAJARO
Tras el juicio de cesura el Juez Dr. Marcos Burgos emitió el veredicto final con la imposición de la pena y una serie de pautas de conducta que Sebastián Escalada (53) deberá respetar si quiere permanecer en libertad y no convertir la pena en una de cumplimiento efectivo.
Consideró que los hechos investigados habían sido acreditados con certeza y declaró responsable al sujeto por los delitos de amenazas reiteradas (dos hechos) y desobediencia a una orden judicial.
El caso comenzó en el año 2017, cuando la madre de las dos hijas del acusado retiró a las niñas del establecimiento educativo al que asistían y se trasladó a los Estados Unidos de Norteamérica con un permiso de viaje por 90 días y sin derecho a cambio de radicación. Escalada nunca más volvió a verlas.-
El sujeto responsabilizó a la Jueza Marcela Pájaro (foto) por los hechos y coenzó a acosarla en un contexto de violencia de género, en el que Escalada se reunía con otros hombres para realizar diversas manifestaciones y hostigar a la jueza, colocando a Pájaro en una situación de desprotección, vulnerabilidad y desigualdad frente a quienes llevaban a cabo las protestas.-
Escalada, en paralelo, radicó diversas denuncias contra Pájaro en el Consejo de la Magistratura, aunque todas fueron desestimadas. Sin las respuestas que buscaba, comenzó distintas campañas en redes sociales y sitios web, ploteó un vehículo con inscripciones que describían su caso y logró reunir adhesiones de otras personas que también sufrieron por el impedimento de contacto con sus hijos.
Pájaro empezó a sentir miedo, sufrió problemas de hipertensión, modificó sus rutinas, requirió custodia policial, presentó una licencia psiquiátrica y atravesó situaciones de pánico.
Al momento de evaluar la pena, Burgos consideró que Escalada “no ha visto personalmente a sus hijas desde hace más de cinco años, situación que a todas luces le ocasiona una inconmensurable angustia y dolor como padre” y que al decir de los testigos se trataba de una persona “con educación, emprendedora, afecta a los deportes, oportunamente dedicado a sus hijas y la falta del contacto aludido lo afectó en su salud y forma de vida”, lo que imponía tener en vista “principios de humanidad, proporcionalidad y racionalidad de la pena” para ponderar ese elemento a su favor “más allá de no justificar ni exculpar penalmente sus conductas”.-
estimó justo imponer a Sebastián Escalada la pena de un año y seis meses de prisión de ejecución condicional”, a lo que agregó además de pautas de conducta de rigor