En el marco de un procedimiento abreviado entre la fiscalía y la defensa pública penal y con el acompañamiento de la familia de la víctima;se condenó a un hombre a diez años de prisión por el homicidio de Antonio Gabriel Luengo ocurrido el día 26 de agosto de este año, en la intersección de calle Morales con 20 de Febrero.

Según la fiscal del caso, al relatar los hechos señaló que «alrededor de la medianoche, la víctima iba caminando por calle Morales y se detuvo a metros antes de la intersección con la calle 20 de Febrero.

Conversó en ese contexto, con un hombre de campera azul y celeste. Situación que fue aprovechada por el hoy condenado, quien se encontraba sobre la misma vereda pero a unos 10 metros, desde atrás y sin ser visto por la víctima le asestó con un cuchillo; un puntazo en la espalda en la zona lumbar izquierda.

Luego de esto, ambos hombres se dieron a la fuga en dirección al lago, para luego ingresar a un edificio en calle Panozzi. La víctima falleció horas más tarde en el Hospital Zonal, a consecuencia de un shock hipovolémico causado por hemorragia interna por lesión de arteria aorta abdominal secundaria por herida de arma blanca.

Describió la fiscal la evidencia que sustenta la acusación, entre ellas la declaración de la novia de la víctima quien estuvo con él, minutos antes del fallecimiento y fue quien llamó al 911, entre otras testimoniales.

El disco compacto que contiene almacenado distintas videofilmaciones del Centro de Monitoreo, de Parques Nacionales, del Servicio del 911, de hoteles y comercios de la zona, un total de 23 videofilmaciones que registraron el momento del hecho, la fuga y el ingreso al Hotel con el cuchillo en la mano.

Tarea de compilación que llevada a cabo por el Cuerpo de Investigación Judicial y que junto al aporte voluntario de las imágenes de los sistemas de seguridad de los comerciantes de la zona, resultó de relevancia para dar la identificación del imputado.

El informe de autopsia, acta de allanamiento llevado a cabo por personal de la Comisaría 2da donde se secuestró cuchillo y vestimentas utilizadas por los imputados el día del hecho y el informe del Gabinete de Criminalística que da cuenta de la recolección de evidencia en el lugar del hecho, mencionó la fiscal, entre otras.

El acusado fue asistido por la defensa pública penal quienes formaron parte del legajo desde el primer momento. La «evidencia de la fiscalía resulta contundente», expresó el defensor. Luego consintió la aplicación de este acuerdo y solicitó se homologue el mismo.

El imputado fue consultado por el presidente del tribunal, quien manifestó su responsabilidad en la comisión de los hechos que se le atribuyen. Acordó además con la aplicación de este acuerdo pleno y en el monto de la pena pretendida. Luego se dirigió a la familia que se encontraba presente en la sala; «no estaba en mis cabales, pido perdón, de corazón se lo digo», expresó.

Finalmente el tribunal luego de un cuarto intermedio aceptó y homologó el acuerdo pleno. Declaró luego como autor penalmente responsable del delito de homicidio simple como co autor -de conformidad con los artículos 45 y 79 del Código Penal de la Nación- y fue condenado a la pena de diez años de prisión.

Cabe recordar que por este hecho hay una mujer imputada por encubrimiento, legajo cuyo plazo de investigación vence en el mes de diciembre.