Tras una evaluación aérea y con información de los equipos en el terreno y técnico del ICE, se recalculó el área afectada a aproximadamente 4491 hectáreas. Las estrategias planteadas desde el primer día con el amplio despliegue de brigadistas en las zonas más activas de forma diaria, la construcción de líneas de defensa, equipos de agua, optimización en el despligue de personal, lanzamiento de agua con medios aéreos, se vio favorecida por las recientes lluvias en la zona que colaboraron para minimizar el comportamiento del fuego.

Este escenario colaboró con todos los esfuerzos en prevenir la propagación de las llamas y profundizar en trabajar con el ataque directo. Las condiciones meteorológicas que prevén aumento de la temperatura y la disminución de la humedad relativa sumado a los vientos que oscilarán entre los 10 y 20 km/h provenientes del sector oeste, alcanzando velocidades de 15 a 25 km/h con ráfagas aún más fuertes, podrían incrementar la actividad del incendio que continúa activo.

La estrategia de combate se centra en las áreas de Los Manzanos, Laguna Quetro y Las Melisas. En estos puntos críticos, se está llevando a cabo un ataque directo utilizando herramientas manuales y equipos de agua. Las brigadas terrestres, compuestas por 92 brigadistas, comienzan el despliegue a las 6 de la mañana y trabajan arduamente en conjunto con el apoyo de medios aéreos para sofocar las llamas. Ayer el Boeing 737 Fireline realizó 14 lanzamientos de agua de 15.000 litros cada uno sobre el sector 2, con la dirección estratégica de un director de tiro de la Administración de Parques Nacionales (APN) a bordo de la aeronave.

En las zonas 3 y 4, se observa una menor actividad del fuego, sin avance hacia el Lago Steffen. En estas áreas, el fuego se mantiene consumiendo zonas que ya habían sido afectadas por el incendio anterior. No obstante, se mantiene un monitoreo constante de la situación.

En cuanto a las poblaciones de Lago Roca y Hess, continúan los trabajos con maquinaria vial de Parques Nacionales en la construcción de cortafuegos y el despeje de vegetación, buscando generar barreras de contención preventivas. Paralelamente, los pobladores de la zona prosiguen con el arreo de ganado a zonas seguras y la limpieza de la interfaz entre la vegetación y sus viviendas e infraestructura.

Con el principal objetivo de minimizar y reducir el tiempo de traslado desde los campamentos hasta los puntos de trabajo en la montaña, se ha dispuso reubicar el equipo de recursos y brigadistas que se encontraban en el camping Viejo Manzano, en el Lago Steffen, hacia el Camping de Roca, en la población Mesa. Se mantendrá un equipo de personas en el Camping Viejo Manzano para atender cualquier eventualidad que pudiera surgir. Este rápido cambio de lugar se logró con el acompañamiento del Ejército Argentino y los Departamentos de Logística de Parques Nacionales.

Para finalizar, es importante resaltar que desde este COE ha destinado los recursos disponibles con un camión Uro y 4 brigadistas, para colaborar con las tareas de combate del incendio en la zona de Epuyén, situación que acompañamos y esperamos prontamente se pueda detener.