Seis familias de Villa La Angostura siguen atrapadas en una compleja y dolorosa situación tras haber sido víctimas de una estafa inmobiliaria por la cual está procesado el ex agente de la firma Lepore Propiedades, Ramiro Fernández. Según afirmaron los damnificados, las denuncias revelan una serie de irregularidades que apuntan también a la firma Lepore Propiedades, en cuyo nombre se realizaron las operaciones, dejando a las víctimas con una serie de compromisos incumplidos y una deuda emocional y económica que persiste hasta hoy.

El inicio de la estafa

Según relataron los propios estafados, “el grupo de damnificados realizó su primer compra en octubre de 2020, confiando en la seriedad de la inmobiliaria Lepore Propiedades y en la reputación de Fernández, quien en ese momento estaba al frente de la gestión”. En las primeras etapas de las compras, las familias se encontraban acompañadas por empleados de la firma, quienes les mostraron los lotes y les aseguraron que todo el proceso estaba en orden. Sin embargo, conforme pasaba el tiempo, empezaron a descubrir irregularidades en la documentación de los boletos de compraventa, lo que desencadenó los reclamos ante la inmobiliaria.

En mayo de 2023, al realizar una visita a la oficina de O.Particulares, las familias notaron el error en los boletos. Tras ello, se asesoraron con abogados y escribanos, quienes les recomendaron insistir con la inmobiliaria para que rectificaran la documentación. Durante varios meses, el grupo realizó visitas semanales y, finalmente, diarias, para exigir la corrección de los documentos. “En un encuentro con el gerente de la inmobiliaria y su esposa, se les aseguró que el problema sería solucionado. No obstante, la situación empeoró cuando, en noviembre de 2023, Fernández fue vinculado a una serie de estafas previas y huyó, lo que levantó más sospechas”, comentaron.

La aparición de los dueños de Lepore Propiedades

A principios de diciembre de 2023, los propietarios de la inmobiliaria, Norberto Lepore y Andrea Marcilla, llegaron a la localidad. “En una reunión con los afectados, los dueños de la firma se mostraron «desorientados» y «desconocían» por completo la situación de los terrenos y las maniobras fraudulentas que se habían llevado a cabo. La Sra. Marcilla, además, es la titular de los terrenos involucrados, lo que genera aún más incertidumbre sobre el nivel de responsabilidad de la firma en este fraude”, según los damnificados.

El estatus de las propiedades y las propuestas de Lepore Propiedades

Siempre según los dichos de las familias estafadas, “a pesar de los esfuerzos del grupo por resolver la situación, la inmobiliaria Lepore Propiedades ha mantenido su postura de solicitar pagos adicionales por la escrituración, a pesar de que los terrenos no cuentan con las obras básicas necesarias para ser habitables”.

Según las víctimas, hubo casos incluso, donde los compradores intentaron realizar el cambio de titularidad de los impuestos, “solo para descubrir que los terrenos ya estaban construidos y escriturados, otra irregularidad que señala la falta de transparencia en el proceso”.
Respecto de los reembolsos, contaron que “algunos damnificados que intentaron recuperar su inversión solo lograron un recuperar parcialmente lo que pagaron y con un acuerdo de confidencialidad”.

Acciones legales y denuncia penal

Las víctimas, además de enfrentar un proceso emocional y económico devastador, han sido acusadas de cómplices y oportunistas por los involucrados en la estafa. A pesar de ello, han decidido seguir adelante con la denuncia penal contra Ramiro Fernández y continuar con la acción civil contra Lepore Propiedades. Señalan que la inmobiliaria, al no auditar adecuadamente sus sucursales, es responsable civil y comercial por las maniobras fraudulentas que se realizaron bajo su nombre.

El impacto de la estafa

Más allá de los daños económicos, las familias denuncian lancertidumbre y el estrés generado por la falta de respuestas claras y el abuso por parte de los involucrados,. Según sus relatos, “han sido objeto de descalificaciones y acusaciones, lo que ha agravado aún más la difícil situación que atraviesan”. (DiarioAndino)