Preocupante Reducción de la Superficie y Volumen de Lagunas en el Parque Nacional Laguna Blanca
Se presentó recientemente el trabajo interinstitucional “Impacto climático y humano en cinco lagunas del Parque Nacional Laguna Blanca”, donde se analizan los factores que han provocado la reducción de la superficie de lagunas ubicadas en el PN Laguna Blanca. Uno de los ambientes estudiados es la Laguna Blanca, que representa el principal cuerpo de agua del parque y de toda la región centro oeste de Neuquén.
Este estudio se enmarca dentro del proyecto “Influencias climáticas y antrópicas en lagos de la Patagonia Argentina: hacia soluciones consensuadas con los actores sociales y tomadores de decisión”, ejecutado entre de la Dirección Regional Patagonia Norte (Dr. Leonardo Buria) investigadores del Instituto Argentino de Oceanografía, de las Universidades Nacionales del Sur y del Comahue y el CONICET (Dres. Facundo Scordo y Carina Seitz) y con la colaboración de la Intendencia del PN Laguna Blanca.
El trabajo analizó la serie temporal de las áreas superficiales de las lagunas entre 1998 y 2024, utilizando imágenes satelitales. Además, examinó un índice climático para identificar períodos secos y húmedos. Finalmente se trabajó, utilizando imágenes satelitales, en la identificación de posibles estructuras de captación y extracción de agua de los arroyos afluentes de la Laguna Blanca, en las secciones fuera de los límites del parque nacional.
Algunos de los principales resultados fueron que la superficie de las cinco lagunas estudiadas disminuyó entre un 20 y un 52 % desde 2007 a 2024, con una reducción mayor en las lagunas más pequeñas, que los meses secos aumentaron un 29% y los meses húmedos disminuyeron un 13%, entre 2007 y 2024 en comparación con 1998-2006, desde octubre de 2020 se han construido, fuera del parque, diferentes puntos de captación y más de cincuenta canales de riego en la alta cuenca del principal arroyo afluente de la Laguna Blanca, y la reducción en la superficie de las lagunas estudiadas se debió principalmente a un aumento de las condiciones de sequía regional.
Sin embargo, los canales de riego en la alta cuenca contribuyeron en reducir un 3% más la superficie de la Laguna Blanca y esto podrían acelerar su desecación en el corto plazo.