¿SE VOLVIÓ EMPÁTICO, COMPRENSIVO, TOLERANTE, SOLIDARIO, GENEROSO, DADIVOSO Y ABIERTO AL DIÁLOGO EN 24 HS?

Detrás de una actitud pausada e irreal, hecha para la situación y absurdamente guionada a un pésimo actor, NO TIENE EN CUENTA LA INTELIGENCIA AJENA, CREE QUE SOMOS FÁCILES DE ENGAÑAR, QUE PUEDE LLEVARNOS DE LA NARIZ Y QUE TENEMOS MUY MALA MEMORIA DE SUS PROPIOS DICHOS, FORMAS Y ACTITUDES.
APARENTÓ UN MILEI DIFERENTE, EDUCADO y NO ASUME QUE SUS MENTIRAS YA NO SE CREEN, SALVO SI SE ES UN LEMUR CABEZA DE TERMO. Usó la cadena para blindar el déficit cero e insistir en lo que el puelo viene repudiando y le hechrá en cara en Octubre.
Afuera, el ruido fue otro en la calle y edificios porteños estuvieron con las cacerolas y ruidos varios. «Ningún argentino vivo experimentó jamás la Argentina que estamos construyendo, es por eso que a veces nos entusiasmamos de más», señaló sin titubear el CRUEL E IRRESPONSABLE mandatario ultraderechista.
El discurso, que duró unos 15 minutos y algunos segundos, fue bastante reiterativo, y sin novedades: muchos analistas creyeron que iba a reconocer el desgaste social. Por el contrario, habló con una insistencia sobre el supuesto «heroísmo de los argentinos», que sufren sin cesar los recortes en universidades, en personal médicos, en jubilaciones y ayudas económicas a las personas con discapacidad.
Cerró con la vacía e irreal futurología que caracteriza a la gestión cruel y discriminatoria: “Si al equilibrio fiscal le sumamos las reformas que queremos llevar adelante, podríamos hablar de un crecimiento de 7 y 8%. En 20 años estaríamos (quienes están haciendo pingues negocios financieros con su política y quienes sobrevivan claro) entre los países más ricos del mundo, (sueña sin razón ni fundamento), pero eso no sucedería por arte de magia necesita de tiempo para que el trabajo pueda adquirir más valor» dijo. Mientras tanto, a seguir sufriendo, enfermos, ambrientos muchos y abandonados la mayoría.-