ARGENTINA SE DERRUMBÓ EN EL RÁNKING DE LIBERTAD DE PRENSA
El último informe que evalúa la libertad de prensa en 180 países advirtió que el gobierno argentino es «abiertamente hostil con la prensa» y que atenta contra «el derecho a la información» de los argentinos. En tanto producto de la lógica de las redes sociales, el ahora presidente sigue adelante, como si todavía estuviera en campaña, con su estrategia de utilizar su cuenta en X para sentar posición en los distintos debates públicos.
Allí refuerza la adscripción de los propios y ataca sin miramientos a los ajenos. Entre los blancos preferidos de sus ataques se encuentran los periodistas críticos con sus políticas de ajuste y hasta se ilusionó con la posibilidad de la quiebra del grupo Perfil de Jorge Fontevecchia y el despido de sus cientos de trabajadores.
El sistemático ataque a la prensa comenzó desde el primer día de gestión cuando suspendió por un año la pauta de medios en lo que fue el prolegómeno de su estrategia de ahogar financieramente a sus «enemigos». Más en evidencia quedó semanas más tarde con su intento por disciplinar a los gobernadores díscolos por medio del ahogo financiero.
Argentina cayó 26 puestos en el ranking que mide la libertad de prensa en el mundo y la organización encargada de elaborar la estadística advirtió que la llegada al poder de los libertarios «marca un nuevo y preocupante punto de inflexión para la garantía del derecho a la información en el país».
El informe «Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2024: los peligros de la industria del engaño», elaborado por la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) ubicó a la Argentina en el puesto número 66 de un total de 180 países. El ránking está liderado por Noruega, Dinamarca, Suecia, Países Bajos y Finlandia. (MinutoUno)