Un trabajador de la Municipalidad de Villa la Angostura, quien padece hipoacusia severa, denunció en sede policial haber sido abusado sexualmente reiteradas veces por compañeros de trabajo, publican hoy los colegas del Diario Andino de la vecina localidad. El denunciante se trata de un empleado municipal sordomudo, de 52 años de edad quien fuera asistido por intérprete de confianza para traducir sus expresiones gesticulares en momentos de radicarse la denuncia en la Comisaría 28 de esta localidad. La causa penal se encuentra tramitando en la fiscalía local, para su investigación.

A pesar del hermetismo imperante, trascendió que los hechos habrían ocurrido dentro de instalaciones municipales, y que los autores del ataque estarían identificados por el trabajador victimizado. El agente municipal debió ser atendido en el hospital Oscar Arraiz.

También se conoció, de acuerdo constaría en el acta radicada, que el denunciante fue víctima de violencia laboral sistemática durante años, donde otros trabajadores lo discriminaran y se burlaran de sus capacidades diferentes.

Ultrajado con un fierro

A raíz de una nueva denuncia penal radicada días atrás, el empleado municipal relató ante autoridades de la Secretaría de Desarrollo Humano que en una ocasión “lo atraparon entre varios y le colocaron un fierro en el ano”, y que por eso hecho debió ser intervenido en el hospital.

Según trascendió de fuentes avocadas a la investigación, los agresores se aprovecharon que de las capacidades disminuidas del trabajador, ya que no puede escuchar ni expresarse verbalmente, ignorando la víctima los nombres de los atacantes.

«Aún así, mediante fotografías exhibidas ante las autoridades, pudo identificar, al menos a dos de los abusadores», indicó el abogado defensor del trabajador supuestamente abusado, Cristian Pettorosso.

Drogas

El agente municipal también denunció la semana pasada, ante la Secretaría a cargo de Graciela Lobos, que en otras oportunidades sus compañeros de trabajo le han tocado sus partes íntimas, se burlaban de su padecimiento de hipoacusia, y que sufriera violencia laboral constante, con maltratos de distintos tipos; mediante tocamientos, burlas y otras acciones denigrantes.

Brindando detalles ante un asistente por lenguaje de señas en momentos de ser entrevistado oficialmente, asimismo señaló que algunos de los empleados involucrados consumen drogas en horario de trabajo, argumentando que se cansó de hacer las tareas laborales solo y sin ayuda de nadie, mientras los otros “descansan y se falopean”, aseguró.