«TRUMP VA A DEDICAR LOS PRIMEROS DÍAS A RESOLVER SUS PROBLEMAS LEGALES»
La elección en Estados Unidos se definió más contundente de lo que pronosticaron las encuestas. Después de una campaña deslucida, donde Kamala Harris tuvo que salir al ruedo para reemplazar a Joe Biden -una movida de urgencia que le inyectó cierta energía al proceso- y con Donald Trump ya sin el efecto sorpresa a su favor.
Los candidatos representan dos posiciones casi antagónicas, conocidas por todos los votantes, pero algunas cuestiones parecen acercarlos más de lo que se sospecha a simple vista. Como dijo el reconocido analista Ian Bremmer, «independientemente de quién gane, casi la mitad del país quería al otro lado, y el resultado requiere encontrar una manera de trabajar juntos».
Trump prometió una deportación masiva de 15 millones de indocumentados, una misión difícil de cumplir, pero que constituye el corazón de su programa y una continuidad de su primer periodo en la Casa Blanca. Durante uno de los debates, Kamala acusó al republicano de haber trabado un proyecto bipartidista en el Congreso que buscaba sumar recursos a la lucha contra el tráfico de personas solo para capitalizar el tema y convertirlo en el eje central de su campaña.
La candidata oficialista fue apuntalada por Biden para ocuparse de la migración irregular proveniente del Triángulo Norte de Centroamérica, un rol que concentró su atención en la primera etapa de la actual administración demócrata, y que le permitió medirse con Trump en un asunto incómodo para su propio partido. El voto latino se diversificó en los últimos años y los republicanos le sacaron diez puntos a los demócratas, un proceso que se consolida año tras año.
Se va a dedicar los primeros días a eliminar sus problemas legales
Con todo, la inmigración no es el único asunto que Trump explotó en esta campaña. La economía se impuso tras cuatro años de una disparada inflacionaria, un nivel de endeudamiento de las familias de clase media en crecimiento y el problema crónico del acceso a la vivienda.
El republicano reeditó su eslogan de «Make America Great Again», que supone un refuerzo del reshoring y la defensa de la industria estadounidense, una hoja de ruta que Biden continuó a través de «Build Back Better», un programa de inversión pública comparado al New Deal de Roosevelt.
Con la vuelta de Trump, el profesor de la Universidad de California en Los Ángeles, Octavio Pescador, dijo que el presidente electo «se va a dedicar los primeros días a eliminar sus problemas legales».
Por otro lado, planteó que «su prioridad es cumplir con sus promesas más radicales, que le resultan relativamente más fácil de llevar a cabo, como la deportación masiva de indocumentados».
«Una estrategia que podrían adoptar los republicanos es buscar a personas con antecedentes criminales en los centros de detención y en las cárceles y deportarlas de inmediato», sostuvo. (LPO)