DURA DECLARACIÓN DEL CONSEJO ACADÉMICO DEL INSTITUTO BALSEIRO

En una sesión extraordinaria, a puertas abiertas y con la presencia de la comunidad educativa —incluyendo personal docente, no docente y estudiantes—, el Consejo Académico del Instituto Balseiro mostró su descontento por “el veto presidencial del miércoles 10 de septiembre a la ley de financiamiento de la educación universitaria y recomposición del salario docente” y aprobó una dura declaración sobre la situación presupuestaria del sistema de educación superior y de instituciones de ciencia, tecnología e innovación de Argentina.
Se definió manifestar acuerdo con el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) “en cuanto a la necesidad de priorizar la educación pública, la formación universitaria de excelencia y la inversión en ciencia y tecnología e innovación y, consecuentemente, jerarquizar su asignación presupuestaria para superar los desafíos que enfrenta la sociedad argentina en su conjunto”.
Se coincidió en exigir “la plena vigencia de la Ley de Financiamiento Universitario Nº 27.795” y se adhirió “a la solicitud del CIN al Gobierno nacional para que el país cuente con una ley de presupuesto nacional que garantice el funcionamiento, el sostenimiento y la rendición de cuentas de todo el Estado, que incluya el monto mínimo allí propuesto para el sistema universitario”.
En la declaración del Instituto Balseiro se sumó el deseo de “confluir en una gran manifestación nacional el día que la Cámara de Diputados de la Nación trate los vetos a las leyes de emergencia pediátrica y de financiamiento universitario”.
“Solicitamos expresamente a los/as legisladores/as nacionales de ambas cámaras, en particular a los representantes de las provincias de Mendoza y Río Negro (el Instituto Balseiro depende de la Universidad Nacional de Cuyo y de la Comisión Nacional de Energía Atómica), que insistan con la aprobación y sostengan en el Congreso la sanción de la ley vetada”, expusieron en la entidad educativa.
En el texto dado a conocer, se indicó que, entre las cuestiones que se analizaron para tomar la determinación de plantear la preocupación reinante, se tuvo en cuenta “que el ecosistema de ciencia, tecnología e innovación y universidades públicas, pilar del sistema productivo argentino, atraviesa una crisis económica sin precedentes, que debe ser atendida con urgencia a riesgo de producir daños irreparables y de largo alcance”.