JORGE OLGUIN FUE ABSUELTO EN EL JUICIO POR AMINISTRACIÓN FRAUDULENTA
Se lo juzgó en su carácter de exgerente administrativo del Colegio Médico de Bariloche, por haber cometido presuntamente administración fraudulenta en perjuicio de ese Colegio. Así lo entendió la jueza Romina Martini (foto) que informó que los acusadores (fiscalía y querellante) no habían logrado demostrar con certeza, más allá de toda duda razonable, que el imputado había defraudado por 568.000 pesos a la institución en la que se desempeñaba como gerente administrativo.-
Al escucharlo, Olguín lloró amargamente y apenas terminó la lectura de la sentencia, Olguín le dio un abrazo a su abogado Dr. Sebastián Arrondo.-
El presidente del Colegio Médico, Dr. Fernando Martínez, aclaró que desconocía las 16 transferencias de dinero que Olguín recibió en su cuenta, que nunca había autorizado pero el entonces secretario de Finanzas de la comisión directiva del Colegio, Dr. Carlos Garate, declaró que había autorizado las transferencias a favor de Olguín porque enfrentaba en ese momento un problema.
Martini no valoró las declaraciones de otros testigos que pasaron por el juicio y que habían comprometido al acusado y el presidente del Colegio Médico, Fernando Martínez, sostuvo que desconocía las 16 transferencias de dinero que Olguín recibió en su cuenta, que nunca las había autorizado.
En cambio, el entonces secretario de Finanzas de la comisión directiva del Colegio, Carlos Garate, declaró que había autorizado las transferencias a favor de Olguín que enfrentaba en ese momento un problema. Martini no valoró las declaraciones de otros estigos que pasaron por el juicio y que habían comprometido al acusado.
La jueza citó a una testigo con experiencia administrativa que trabajaba en el Colegio Médico y la mujer aseguró que los integrantes de la comisión directiva no podían desconocer ese tipo de transferencias. Afirmó que la información estaba a la vista, disponible.
El abogado querellante Dr. Raul Ochoa se mostró desconcertado y tanto él como el fiscal adjunto del caso Gerardo Miranda disconformes, se retiraron de la sala de audiencias con la idea de que impugnarán la sentencia.