EL TRIBUNAL DE IMPUGNACIÓN CONFIRMÓ LAS CONDENAS DE LOS TRES DOCENTES POR EL HOMICIDIO DE UNA NIÑA EN LAGO GUTIERREZ

El Tribunal de Impugnación de la provincia rechazó los argumentos de las defensas y confirmó la sentencia que condenó a tres docentes como responsables del delito de homicidio culposo de Celeste, la pequeña que murió ahogada en el lago Gutiérrez, en el marco de una actividad escolar de fin de año.
Las maestras Patricia Cantero (37), Norma Millamán (50) -condenadas a las penas de dos años y seis meses de prisión-, y Cristian Arriagada (46) -condenado a tres años de prisión en suspenso-, habían impugnado la sentencia a través de sus abogados defensores particulares.
Tiempo atrás, el juez Marcos Burgos consideró probada su responsabilidad en la muerte de la niña, durante una excursión educativa. En el caso también había sido condenada en juicio abreviado la maestra Malén Painefil -dos años de prisión en suspenso-, mientras que Alejandro Marelli, inicialmente ligado al caso, terminó sobreseído en las instancias preliminares del proceso.
Aunque fueron muchos los aspectos señalados por las defensas en su presentación ante el Tribunal de Impugnación de la provincia, una parte importante se la llevó el sobreseimiento que consideraron “prematuro” de Marelli, posición que fue señalada por el juez al momento de dictar la sentencia, considerando que debió permanecer ligado al caso.
Tras la revisión de los argumentos, los jueces del TI confirmaron la responsabilidad de las dos maestras de grado y el profesor de educación física en el hecho bajo análisis, ocurrido en el marco de una jornada recreativa de la que participaban 84 alumnos de la Escuela 273, en el complejo Los Baqueanos, sobre la margen sur del lago Gutiérrez, acompañados por docentes y un grupo de padres.
La actividad estaba enmarcada en el proyecto educativo “Nos vamos dejando huellas”, mediante el cual los alumnos de sexto grado de la escuela primaria despedían a sus pares de séptimo, que egresaban del nivel primario.
Ocurrió alrededor de las 17 horas del 10 de diciembre de 2021, cuando una niña de doce años que jugaba con amigas en el agua del lago se ahogó en un escenario que, según la teoría acusatoria, se desencadenó ante la falta de supervisión de los adultos que acompañaban el grupo de 84 alumnos del establecimiento educativo.