Este martes, en el marco de los festejos por el 120º aniversario de nuestra ciudad, el Concejo Municipal homenajeó a 31 antiguos pobladores que con su gran esfuerzo y trabajo, marcaron los cimientos de Bariloche. Son vecinos y vecinas mayores de 70 años que se destacaron por su labor pionera.

De quiénes se trata: Jorge Pablo Mogensen, Luis Oscar Cárcamo, Elba Lelia Castro, Blanca Ester Ruíz Moraga, Olga Ester Pulgar, Ana María Gómez De Mogensen, Domingo Segundo Paillalef, Julio Ernesto Martínez, María Peña De Barba, Nora Costilla, Alberto Omar Nahuelquin, Federico San Martín, Héctor “Cacho” Salamida, Elba Concepción Santiago, Zunilda Álvarez, Paulina Margarita Cohen, Delfa Santibáñez, Julio Alberto “Pancho” Cáceres, German González, Graciela Marinao, María Bárbara Maldonado, Jorge Balmaceda, Luis Ganim, Nicolás Cotaro, Irene San Martín, Celinda Fernández, Brígida Epulef, Epifanio Ermindo Umaña, Héctor “Pochi” Gingis, Tolentino Cevallos y Raúl Pérez.

El sentido acto se desarrolló en la Escuela 273. La presidenta del Concejo, Natalia Almonacid, dio unas palabras de bienvenida y destacó la importancia de brindar un merecido homenaje a estas personas que tanto hicieron y hacen por Bariloche. También agradeció al equipo de directivos del colegio por prestar las instalaciones de la institución.

Por su parte, la gobernadora Arabela Carreras se mostró muy contenta por distinguir a los antiguos pobladores de la ciudad y resaltó el enorme aporte a la comunidad que realizaron y realizan.

En la misma línea, el intendente Gustavo Gennuso ponderó la labor de cada una de las personas distinguidas y puso en valor el desarrollo de este tradicional homenaje.

Uno de los momentos más emotivos del acto fue la reproducción de un video realizado por el Concejo Municipal, con el testimonio de los protagonistas, quienes contaron sus historias de vida y relataron atractivas anécdotas vinculadas con Bariloche y sus años en los que era un pequeño pueblo.

Familiares y amigos de los homenajeados; y autoridades municipales, provinciales y nacionales, disfrutaron del emotivo reconocimiento. Las personas distinguidas recibieron presentes y un certificado.

El evento, organizado por el Concejo Municipal y contó con la presentación de la cantante Belén Álvarez, quien deleitó a todos con un bello repertorio de canciones.

El detalle de los distinguidos

Jorge Pablo Mogensen: Fue telegrafista del viejo Correo durante casi 40 años. Reconocido dirigente deportivo de la ciudad, trabajó en diversos clubes de fútbol, dejando su impronta y transmitiendo su pasión. Fue locutor y periodista de LU8 y se desempeñó muchos años en el programa Tribuna Deportiva. En la década del ’70, fue director del área de Deportes de la municipalidad.

Luis Oscar Cárcamo: Reconocido taxista de la ciudad. Fue el fundador de la histórica parada de taxis Urquiza, que se encontraba en la intersección de las calles Urquiza y Moreno. También trabajó manejando un camión durante mucho tiempo.

Elba Lelia Castro: Trabajó siempre de manera independiente. Durante muchos años se dedicó al tejido de pulóveres. Varias prendas que confeccionó fueron destacadas y premiadas en el Concurso del Pulover, de la Fiesta Nacional de la Nieve. También vendió ropa y tapers.

Blanca Ester Ruíz Moraga: Su primer trabajo fue como cuidadora de niños. Luego, fue cajera en el ex Mercado Municipal que se encontraba ubicado en la esquina de Moreno y Villegas. También se desempeñó como mucama en diferentes hoteles de la ciudad.

Olga Ester Pulgar: Trabajó como empleada doméstica. Fue mucama en el área de Salud y visitadora de abuelos, a quienes cuidaba y les brindaba gran contención.

Ana María Gómez De Mogensen: Ama de casa, se dedicó a criar y cuidar a sus tres hijos. La familia de su mamá Aquilina estuvo muy vinculada con el trabajo ferroviario en la zona, por lo que desde muy chica Ana María se relacionó con este rubro.

Domingo Segundo Paillalef: Fue uno de los primeros taxistas de la ciudad, con su móvil 044. Tenía su lugar de parada de San Martín, a la altura del Centro Cívico. Se dedicó al rubro durante muchos años.

Julio Ernesto Martínez: Trabajó en las primeras obras de asfalto del tramo de la ruta que va desde el río Limay hasta Piedra del Águila. Luego, fue despachante de combustible en la estación YPF. También cuidó caballos en la Estancia San Ramón y finalmente se desempeñó en ENTEL.

María Peña De Barba: Se dedicó toda su vida al sector hotelero. Junto con su esposo Enzo, desarrolló el concepto del turismo joven en Bariloche con sus hoteles Las Piedras 1 y las Piedras 2. Luego, impulsaron varios establecimientos hoteleros más y otros diversos locales. Hoy continúa al frente de su primer hotel estudiantil, después de más de 60 años de actividad laboral y comercial ininterrumpida.

Nora Costilla: Docente. Toda una vida enseñando en las aulas. Fue profesora en varios colegios de la ciudad, como el Maria Auxiliadora, Primo Capraro, Castex y la Escuela Nº 16, entre otros.

Alberto Omar Nahuelquin: Electromecánico. También fue bombero voluntario y chofer de colectivos. Además, fue presidente de la Junta Vecinal del barrio Las Quintas. Hoy sigue trabajando en su taller mecánico.

Federico San Martín: Fue operador de LU8 Radio Bariloche. Era llamado “Rubén Ángel” San Martín. Así lo nombraban sus compañeros de equipo y así lo conocían los oyentes. También trabajó en el viejo Correo.

Héctor “Cacho” Salamida: Mecánico. Acompañó a muchos referentes locales del rally y motocross. Un apasionado por la mecánica y las carreras.

Elba Concepción Santiago: Costurera. Se encargó de realizar el armado de botas y borcegos para Gendarmería. Participó de la comisión de Lalcec Bariloche, fue presidenta de la Cooperadora de la Escuela 71, paramédica y también participó en la Cruz Roja.

Zunilda Álvarez: Trabajó muchos años en el área de Acción Social de la municipalidad. Estuvo en un hogar de tránsito, cuidando y ayudando a chicos en situación de calle y luego acompañó a gran cantidad de jubilados, llevando adelante talleres de aprendizaje y entretenimiento. También prestó sus servicios en el sector hotelero y el gastronómico.

Paulina Margarita Cohen: Paulina (o “Miss Pauline”, como muchos la conocen) fue una persona clave en la historia de la Escuela Woodville. Ayudando en las aulas con las clases de inglés, para muchos niños y niñas fue como una hermana mayor. Una figura maternal, brindando cariño cálido y humano que trascendía su rol como docente. Es ese mismo cariño que transmite en la actualidad, cuando saluda a los alumnos en el ingreso al colegio cada mañana.

Delfa Santibáñez: Trabajó en hoteles como mucama y también realizó tareas domésticas en casas particulares. Principalmente, se dedicó a criar a sus 11 hijos.

Julio Alberto “Pancho” Cáceres: Fue chofer de colectivos de una empresa de transporte de turismo y trabajó esquilando en los campos de la zona. También repartió leña y fue operador de la planta de agua en el Departamento Provincial de Aguas (DPA).

German González: Fue secretario general del SOYEM, gremio al que estuvo vinculado desde su fundación. También trabajó en el hospital zonal y en gastronomía.

Graciela Marinao: Puso el primer almacén en el barrio El Mallín, en la calle Villegas. Se llamaba “Luisito” en referencia al menor de sus cuatro hijos. Graciela es muy reconocida en su barrio por su labor solidaria, ya que siempre está para quienes necesitan una mano.

María Bárbara Maldonado: Trabajó en reconocidos comercios de la ciudad, relacionados con la hotelería, ferretería/bazar y repuestos del automotor. También prestó sus servicios en Capacitas.

Jorge Balmaceda: Trabajó en el Ejército. En Bariloche, formó parte de la fundación del Destacamento de Instrucción Andino, en 1964. Además, es instructor de esquí y puso una fábrica de zapatos en Puerto Moreno.

Luis Ganim: Mecánico. También manejó taxis, remises y camiones. Además, con un colectivo llevaba a turistas a diversas excursiones.

Nicolás Cotaro: Trabajó durante muchos años en el laboratorio de Ingeniería Nuclear del Centro Atómico Bariloche y luego, en el sector de mantenimiento de las aulas del Instituto Balseiro.

Irene San Martín: Trabajó en el Mercado Municipal que funcionó en Moreno y Villegas, y se dedicó muchos años a la costurería y al tejido de pulóveres artesanales.

Celinda Fernández: Trabajó como jefa de lavadero del hotel Nahuel Huapi y se jubiló en ese mismo lugar. También realizó tareas de mucama en otros establecimientos hoteleros.

Brígida Epulef: Es una de las fundadoras de la Asociación de Recicladores Bariloche (ARB), organización que trabaja en el vertedero hace más de 17 años. Su familia se dedicó a la venta de leña y a la crianza de animales. En 2001 el negocio comenzó a caer y Brígida empezó a trabajar con la basura, recuperando el material reciclable.

Epifanio Ermindo Umaña: “Lepi” trabajó en chocolaterías y panaderías. Con gran esfuerzo logró poner su propio local de repostería, donde en la actualidad continúa preparando exquisiteces. Otra pasión de “Lepi” es el ciclismo. Corrió muchas competencias y ganó varias.

Héctor Enrique Gingins: “Pochi”, como todos lo conocen, tiene una reconocida bicicletería en el barrio Lera, que lleva su apodo como nombre. “Pochi” continuó con la tradición de su familia y hoy sigue reparando bicicletas. También es guía de turismo.

Tolentino Cevallos: Tolentino es un reconocido vendedor de huevos de la ciudad. Con su carro, recorre todos los días las calles de la ciudad. Se instala en el barrio Belgrano, a pocos metros de la avenida Pioneros, y allí aguarda que los vecinos arriben a comprarle sus productos.

Raúl Pérez: Es un reconocido luthier de la ciudad. En su taller, fabrica de los más variados instrumentos para artistas de todo el mund