Escuchando a un candidato por radio me dejó impresionado la liviandad de las propuestas que uno supone serias, a menos que realmente supongan que no llegarán a ser electos por la gente en cuyo caso se puede proponer cualquier cosa total…. Como un vendedor de biromes en un colectivo.-

Este candidato y no es el único, propone o sugiere o promete hacer cosas para cuyos recursos evidentemente o no conoce de donde saldrán, ni conoce de donde salen los recursos del estado y obviamente tampoco propone de donde saldrán antes de hablar o prometer.-

Decir que se harán cientos de viviendas supone creer que hoy no se hacen porque no se quiere o se desvian esos montos de dinero a otros fines con absoluta mala intención, en fin. Nunca pensar por ejemplo que falte dinero y no hay a quien sacarle porque no le sobra a ningún estamento.-

Hablaba de cerrar Vaca Muerta por ejemplo sin ofrecer alternativas de recursos para la nación más allá de las alternativas en materia de combustibles y energía que habría que cubrir para compensar, no sólo lo que necesitamos hoy sino a futuro.-

Paradójicamente se trata de una persona conocida que «vive» literamente de recursos y asalariado aún indirectamente del estado del que exige tener los aportes y no le importa claramente de dónde salen o de donde habría que sacar para que él cobre.-

No es el único caso ya que supone y propone una mayor participación vecinal en las decisiones que tome el estado desconociendo que cada candidato propone una forma de gobierno, un tipo, una asignación de recursos determinada que todo el mundo vota y que quien más votos tenga, tiene más adeptos a lo que propone. Si no se respeta se deja todo librado a que nadie pueda cumplir lo que promete pues la voluntad vecinal podría torcer o redestinar recursos que la mayoría eleccionaria votó para otra cosa.-

Una forma claramente antidemocrática de no respetar la voluntad popular. Una forma claramente antidemocrática que una minoría podría utilizar para torcer la voluntad de la mayoría arrogándose incluso la potestad de señalar que todos los demás están equivocados y a través de una alianza que podría ser claramente espúrea para no dejar gobernar a la mayoría.-

Escuche atentamente a quienes prometen y se candidatean porque la mayoría sólo busca su bienestar no el de todos y desconoce a veces abiertamente incluso cómo funciona un estado que en épocas de malaria como ésta, suele estar jaqueado de todos lados empezando por los insaciables dirigentes piqueteros y los gremios a los que pertenecen. (ROSL – 09-03-23 / 10 hs)