Los avances de la investigación del caso del trabajador Municipal abusado y torturado por otros pares tiene, por estas horas, dos vetas interesantes. Por un lado, según confirmó el abogado Cristian Pettorosso, defensor del empelado victimizado, “esta mañana continuarán con la toma de testimonios en la sede fiscal”, mientras que por el otro, se avanza en determinar el grado de responsabilidad que podrían tener los funcionarios ejecutivos que actuaban en ese momento y no tomaron intervención en radicar las denuncias correspondientes.

El trabajador en cuestión es un hombre grande, no oye, ni habla. A fines del año 2012 consiguió un trabajo en la municipalidad y para él, eso era no solo una oportunidad de estabilidad económica, era además la oportunidad de insertarse, en blanco, en el mundo laboral.

“La toma de declaraciones, apunta ahora a acreditar los hechos ya denunciados, como así también la identificación de más autores y partícipes que colaboraron en la realización de los tormentos”, indicó el letrado. Por otro lado, desde la querella particular también se sumaron pruebas que permitirían evaluar responsabilidades de funcionarios jerárquicos que tenían conocimiento de los hechos.

Cabe recordar que cuándo iniciaron los abusos, fue en el año 2013 y en ese entonces, estaban al frente del municipio Roberto Cacault y Guillermo Caruso y según la Defensa, no solo debió haber denunciado los hechos, sino también separar de los puestos de trabajo a los empleados señalados como autores de los tormentos. Por esa inacción, podría haber incurrido en Incumplimiento de los Deberes de Funcionario Público.

Desde ese momento hasta este año, el trabajador debió soportar los abusos sexuales ( en una ocasión debió ser atendido en el hospital), la tortura (submarino seco), burlas y discriminación. El trabajador de la Municipalidad, padece hipoacusia severa y denunció en sede policial haber sido abusado sexualmente reiteradas veces por compañeros de trabajo.

Según consta en la primera denuncia radicada por la víctima en la Comisaría, además del abuso sexual que implicó que debiera ser atendido en el Hospital local (luego de que fuera atrapado por varios sujetos y le colocaran un hierro en el ano), el hombre fue víctima de violencia laboral sistemática durante años, donde otros trabajadores lo discriminaron y se burlaron de sus capacidades diferentes.

Hasta ahí, el caso por sí mismo resulta aberrante.

Diario Andino tomó conocimiento de nuevos detalles de la investigación que se trataría en la Fiscalía local. Según trascendió, en una ocasión habría sido sometido a la técnica de tortura conocida como “submarino seco” (tormento que consiste en tapar la cabeza de la víctima con bolsas para quitar el oxígeno. Cabe mencionar que este método era utilizado por los delincuentes militares de la última dictadura).

“Acompañado de familiares, amplió su denuncia criminal en tribunales, sosteniendo ante autoridades fiscales que también fue torturado por al menos dos compañeros de trabajo, con el uso de una bolsa plástica colocada en la cabeza, impidiéndole la respiración hasta el borde de la sofocación letal”, indicó el abogado de la víctima, Cristian Pettorosso.

Asimismo, se supo que dos de los sospechosos que en primera instancia estaban investigados, fueron descartados por la propia víctima, quedando ahora otros dos trabajadores bajo investigación. «Mediante fotografías exhibidas ante las autoridades, pudo identificar al menos a dos de los abusadores», indicó anteriormente el abogado defensor del trabajador denunciante, señaló Cristian Pettorosso.

Si bien la víctima ya declaró, puede seguir ampliando su testimonio a medida que recuerde hechos, cabe señalar que en este tipo de casos, es común que al sentirse apoyados y contenidos, los abusados aporten más datos de forma paulatina, por lo tanto no se descarta que en los próximos días salgan a la luz nuevos detalles de caso.

«La víctima va narrando de a poco todas las desgracias soportadas durante años que sufrió en silencio, cuando inescrupulosos se aprovecharan de sus capacidades diferentes, encontrándose por entonces muy vulnerable. Ahora está fortalecido y tiene sed de Justicia. Necesita liberarse de esta pesada carga emocional que lo sofoca más que el submarino seco que le hicieron estos salvajes; y está decidido a ir contra todos los involucrados, incluidos los responsables que por omisión de sus deberes públicos, no hicieron nada para ayudarlo. Tenemos más evidencias que serán suministradas en estos días a la agencia fiscal, y la situación se pondrá difícil para algunos”, finalizó el penalista.

Cabe señalar que en el caso de ser hallados culpables los dos sujetos sospechados de ser autores de los hechos (abuso sexual, tortura y el acoso laboral) no solo correspondería la exoneracion del municipio, sino que además podría caberles una pena de cumplimiento efectivo en prisión. (DiarioAndino)